¿En qué mes se celebra?
Muchas personas sufren depresión y ansiedad. Como resultado, a muchas de las personas que han recibido un diagnóstico adecuado de un terapeuta autorizado o de algún otro profesional médico autorizado se les han recetado antidepresivos para intentar reducir los síntomas. Y, como octubre es el Mes de Concientización sobre la Muerte por Antidepresivos, es una gran oportunidad para hablar sobre la depresión y el uso indebido de medicamentos recetados que han causado lesiones e incluso la muerte.
Depresión, antidepresivos, tratamientos y sustancias
La depresión es un trastorno grave del estado de ánimo. Es común y también se la conoce como depresión clínica o trastorno depresivo mayor. Provoca síntomas graves que afectan la forma en que las personas piensan, realizan sus actividades cotidianas y se sienten. Por ejemplo, la depresión puede afectar los hábitos de trabajo, alimentación o sueño de una persona.
Existen formas de depresión que son circunstanciales o ligeramente diferentes. Algunos ejemplos pueden incluir:
- Depresión psicótica.
- Trastorno depresivo persistente.
- Depresión posparto.
- Trastorno bipolar.
- Trastorno afectivo estacional.
Como la depresión no se puede “curar”, el objetivo a alcanzar es la remisión. Después de todo, los síntomas se pueden mitigar y la depresión en sí se puede tratar.
Los planes de tratamiento pueden incluir:
- Tomar los medicamentos recetados según lo previsto.
- Asistir a psicoterapia de manera constante.
- Evitar el alcohol y las drogas (ilícitas/recreativas).
- Completar las tareas asignadas.
Aproximadamente un tercio de las personas con depresión clínica abusan del alcohol y las drogas. Este abuso puede ser una forma de lidiar con la desesperanza, la desesperación y la baja autoestima. Un programa de tratamiento, como los que ofrece FundacionesDiana, que abordan tanto el abuso de sustancias como los trastornos coexistentes, como la depresión, puede ayudar a detener la progresión de ambos.
Debido a que el alcohol es un depresor del sistema nervioso central, su consumo puede afectar el juicio y reducir las inhibiciones. El consumo de alcohol puede aumentar el riesgo de que una persona deprimida intente suicidarse.
El abuso de drogas y alcohol puede exacerbar un trastorno depresivo al irritar los síntomas de la depresión, interferir con el curso del tratamiento y aumentar el riesgo de hospitalización.
En conmemoración del Mes de Concientización sobre la Muerte por Antidepresivos, es la oportunidad perfecta para compartir cómo, si bien los antidepresivos suelen ser seguros cuando se usan según lo prescrito, estos medicamentos pueden tener efectos secundarios y riesgos.
Los posibles riesgos/efectos secundarios pueden incluir:
- Toxicidad.
- La toxicidad puede provocar ideación suicida.
- La toxicidad puede provocar una disminución de la serotonina (afecta negativamente al cuerpo a lo largo del tiempo).
En definitiva, es importante que una persona que lucha contra la depresión mantenga un diálogo abierto con el médico o el terapeuta que le prescribe el medicamento, asegurándose de que le informen de cualquier cambio en su estado o incluso si piensa dejar de tomar antidepresivos por completo. No se recomienda dejar de tomar ningún medicamento sin consultar antes con el médico.
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